Una investigación arqueológica regional enfrenta desafíos que requieren una cobertura en etapas, ya que algunas respuestas sobre procesos culturales del pasado generan nuevas preguntas y estrategias. Este proyecto colectivo e interdisciplinario, realizado en Fiambalá y Chaschuil (Catamarca, Argentina), reúne a arqueólogos, químicos, físicos y geólogos de diversas instituciones. Su objetivo es entender la interacción y cambio en los sistemas sociales prehispánicos, explorando la diversidad cultural y ambiental de la región a lo largo del Holoceno. Desde 1994, el proyecto ha sido financiado por organismos públicos, como la Universidad de Buenos Aires y la Agencia de Promoción de Ciencia y Tecnología.